Aceptando la soledad

Segundo post en una misma maniana... pero es que me aburro mazo hoy en el curro.
Se que tengo un trauma de pequenia (bueno tengo más de uno), y me da miedo comer sola. Pero hoy ha sido inevitable, así que le he "echado huevos" y me he ido a la cafetería sin más companía que mi móvil... Nouf me ha preguntado que si nunca he comido sola fuera de casa. Hm... sólo recuerdo el anio pasado aquí en Finlandia, que cuando no había más remedio que comer sola me iba al McDonalds, porque en la universidad me daba "cosa", pero no pasó muchas veces afortunadamente.

Recuerdo mi primera semana de cole en EEUU. En el instituto estaba prohibido comer en otro sitio que no fuera la cafetería, pero yo aún no conocía a nadie, y creía que si aparecía sola, iba a pasar como en las típicas pelis americanas que todas las mesas están cogidas según los ghettos, que te miran mal e incluso te hacen la zancadilla para dejarte en ridículo. Y me daba miedo. Así que desafiando las estrictas reglas, me iba con mi sandwich afuera, a las escaleras de la puerta principal. Lo hice 2 días, y esos 2 días el director me vio y me avisó que no podía comer ahí, y que si me volvía a ver me mandaría castigo. Así que al tercer día con un par de ovarios, al salir de clase de espaniol que tenía justo antes del almuerzo (si... clase de espaniol) me acerqué a una tía que resultó ser animadora, y le pregunté si podía comer con ella. No sé cómo, ella creyó que lo que la pedía era ir con ella y sus amigos al baile del viernes :-O Pero se arregló el malentendido y me "dejó" que comiese con las demás animadoras y jugadores de fútbol (experiencia horrible por cierto). Menos mal que a los 2 días Yoana (la que sería mi amiga, con raíces mexicanas) se me presentó y me invitó comer con ella y sus amigos.

La otra comida sola que recuerdo en Espania fue el primer día de las pellas de la uni. Ibamos a comer todos juntos pero no se por qué, me rallé con LAzorra, y como mi madre no me esperaba para comer, decidí ir a un Burguer yo sola. Por eso a partir de entonces, las 3 veces que he comido sola, han tenido que ser en hamburgueserías, ahí me sentía casi como en casa.

Supongo que este es otro paso para aceptar que no es malo estar sola, aquí no me siento observada ni la gente cuchichea imaginariamente "mirala, seguro que nadie la quiere"... Finland is different.